Al igual que los adultos, los niños sufren de depresión sólo que no siempre por las mismas razones que agobian a los adultos. Pueden presentarse en diversas formas y grados, en ocasiones es más fuerte la depresión que en otros casos. Las razones de estas depresiones en los niños son en su mayoría por maltrato físico o mental, por parte de los padres y las personas que lo rodean. El maltrato físico en exceso y constante es una razón de depresión para cualquier persona y más para los niños porque no tienen la capacidad de soportar tal trato.
Según Héctor Pauchard Hafeman, en la página http://www.relaciones-humanas.net/depresioninfantil.html.
Nos dice que:
Los niños que viven con mucha tensión, que han experimentado una pérdida importante o que tienen desórdenes de la atención, del aprendizaje o de la conducta corren mayor riesgo de sufrir depresión. Dos son los factores de riesgo más destacados en esta patología. En primer término está el que ella tiende a presentarse en determinadas familias. Y en segundo término, la existencia de situaciones de maltrato, que fundamentalmente afectan la seguridad por respaldo social.
Caracterizan a la depresión los siguientes síntomas:
- Tristeza persistente, lloriqueo y llanto excesivo.
- Pensamientos o expresiones suicidas o actuaciones autodestructivas.
- Desesperanza.
- Aburrimiento persistente y falta de energía.
- Pérdida de interés en sus actividades favoritas; o incapacidad para disfrutar de ellas.
- Alteración notoria en los patrones de comer y de dormir.
- Quejas frecuentes de enfermedades físicas, por ejemplo dolor de cabeza o de estómago.
- Concentración deficiente.
- Deterioro en los estudios y ausencias frecuentes de la escuela.
- Aislamiento social, comunicación pobre.
- Problemas para relacionarse acrecentados.
- Hablar de o tratar de escaparse de la casa.
- Ataques de rabia u hostilidad persistente.
- Baja exo-estima y sentimientos de culpabilidad
- Alta sensibilidad al fracaso y al rechazo.
Todas estas características identifican a una persona deprimida y depende del grado al que llegue que se pueda tratar y obtener resultados favorables para corregir o aliviar estos síntomas. En el caso de los niños los síntomas son menores como sentir que no son queridos, baja autoestima, sin motivaciones, aislamiento, llanto, perdida del apetito, del sentido del humor, tristeza, desanimo y dificultades para realizar actividades a las que esta acostumbrado hacer. La manera en la que podemos combatir esta situación es animar al niño e incentivarlo para que realice nuevas actividades que le permitan incluirse en actividades sociales. Pero antes de todo esto, es necesario investigar la raíz del problema que presenta y que lo pone en ese estado de ánimo para saber qué es lo que le hace falta para superar esa etapa.
En caso de que la depresión sea por maltrato físico, es necesario conversar con los padres del niño e indagar las razones del maltrato, recomendar que no es la mejor manera golpear a los niños para que hagan alguna tarea o actividad domestica. Necesitan incentivos acorde a ellos para que logren un buen desempeño y emocionalmente se sientan bien.
By: Debra. B
By: Debra. B
No hay comentarios:
Publicar un comentario